Los argentinos consumen casi tres horas de televisión
por día, en su mayor parte a través del cable, ya que el 68 por ciento
de los hogares está abonado a un servicio pago. La omnipresencia de la
TV no ha desplazado a la radio, que mantiene en las casas un lugar
central. Con la masividad del acceso a las netbooks y los teléfonos
celulares, la sociedad se va perfilando como fuertemente digitalizada.
Facebook –seguida por YouTube– es la página más visitada por la
población, que colocó a las redes sociales en el puesto número uno de
los contenidos más consumidos en Internet. Los datos surgen de la
primera Encuesta Nacional de Consumos Culturales y Entorno Digital, que
la Secretaría de Cultura de la Nación realizó a través del Sistema de
Información Cultural de la Argentina (SInCA).
El trabajo buscó registrar los gustos de la sociedad con respecto a
la cultura, y los consumos culturales que se están haciendo
concretamente. Fue realizado por la Universidad Nacional de San Martín
con la colaboración del Centro de Investigaciones en Estadística
Aplicada (Cinea) de la Universidad de Tres de Febrero, y consistió en
una encuesta en 3600 hogares de las seis regiones del país, a mayores de
12 años.
Uno de los datos que se desprenden de la investigación es que la
computadora es el equipamiento que más se extendió socialmente en los
últimos tiempos. El 71 por ciento de los argentinos tiene una PC, el 65
por ciento se conecta a Internet diariamente y 60 de cada 100 tienen
conexión en su casa.
La computadora, además, se usa bastante: dos horas y media diarias
en promedio, para conectarse a redes sociales o chequear mails.
En el mapa de los consumos digitales, también ganó mucho espacio el
teléfono celular. En relación con su uso cultural, son utilizados
principalmente para escuchar música y radio. Un 24 por ciento los
emplea, además, como vía de acceso a Internet.
Desde el año 2005 no había una radiografía cultural como ésta,
aseguró Natalia Calcagno, la coordinadora del SInCA. Este tipo de
trabajo, explicó, “sirve principalmente para pensar políticas públicas,
porque no podemos resolver si no sabemos por qué o dónde falta”. En este
caso, lo más valioso de la foto es que incorpora por primera vez para
cada consumo cultural el digital. “Eso nos permite ver el cambio al
acceso cultural y va a definir el futuro de la industria cultural en la
Argentina.”
La televisión sigue ocupando la mayor cantidad del tiempo libre. El
98 por ciento de los consultados dijeron que se sientan frente a la
pantalla “casi todos” o “algunos” días por semana.
En promedio, los argentinos miran casi tres horas por día y casi la
mitad supera las dos horas diarias. Consultados sobre para qué encienden
la TV, 73 de cada 100 dijeron que para mirar noticieros. Más de la
mitad dijeron mirar también películas y series.
El consumo de televisión es mayormente de señales pagas. El 81 por
ciento de los hogares destina una parte de su presupuesto a un abono de
TV por cable (68 por ciento) o satelital.
La radio, contra todas las previsiones, no ha perdido espacio. Por
el contrario, en el 86 por ciento de las casas se la sigue escuchando.
El encendido es en promedio de casi tres horas y media por día. Los
programas preferidos son los musicales, seguidos de los de noticias. La
FM es más elegida que la AM.
Tanto la televisión como la radio son aparatos infaltables en los
hogares: los tiene el 95 por ciento. En orden de importancia, le sigue
de cerca el teléfono celular (85 por ciento), que supera largamente al
fijo, que se convirtió en un equipamiento residual, presente en sólo el
68 por ciento de las casas.
Otro equipo muy valorado es el reproductor de CD (el 85 por ciento
de los consultados dijo tener uno) y el reproductor de DVD (74 por
ciento).
El consumo de cine y video en el hogar, consigna el trabajo, es una
actividad muy practicada, con un 84 por ciento de menciones.
Principalmente se miran películas a través de la TV paga. El consumo de
películas on line o bajadas de Internet es bajo, menor al 20 por ciento.
El 40 por ciento de los encuestados dijeron ir al cine por lo menos
una vez al año para ver, preferentemente, películas de acción, comedias o
de aventuras. Las producciones extranjeras fueron las más elegidas,
pero el cine nacional fue valorado también positivamente.
Según la investigación, el gasto cultural al que se destina mayor
presupuesto es el abono de Internet: en promedio, se llevó en el 2013
$1236 anuales. Los encuestados dijeron que lo que más compraron fueron
películas en DVD, aunque por su costo –que obviamente incluye al
circuito de películas pirateadas que se compran en la calle– es el rubro
en que menos se gasta, en promedio 38 pesos al año. Hay menos
compradores de libros, pero que gastan sumas mayores (178 pesos anuales
en promedio).
En los hogares argentinos hay, en promedio, una biblioteca con 82
libros y una discoteca de 76 CD. La encuesta reveló que escuchar música
es la práctica cultural más extendida, ya que el 99 por ciento de la
población lo hace diariamente. Se escucha más musica en castellano que
en otros idiomas. Gustan muchos géneros, pero lo más elegido es la
canción romántica (85 por ciento), seguida del folklore (84 por ciento) y
el rock nacional (81 por ciento).
Cerca de la mitad de los encuestados (46 de cada 100) dijeron haber
descargado música de la web. Si se trata de escuchar música en vivo, los
números bajan: la cantidad de gente que dijo haber ido a un recital en
el último año fue sólo del 34 por ciento.
El 43 por ciento, en cambio, contó que va a bailar “regularmente”,
en fiestas o boliches. El género preferido es la cumbia. También hay un
gusto por el canto: el 20 por ciento de los consultados dijo cantar o
tocar un instrumento. La guitarra es el más popular.
Al mismo tiempo, los argentinos siguen definiéndose como muy
lectores. El 85 por ciento asegura leer (diarios, libros, revistas, en
papel o formato digital). La lectura digital está siendo usada para los
diarios, pero casi nada para los libros, donde sigue primando el formato
de papel. El uso de la PC para la lectura digital avanzó notablemente:
hoy la usa el 45 por ciento de los argentinos, más del doble que hace
diez años, según registró entonces la Primera Encuesta Nacional de
Lectura. En cambio, las revistas parecen ser un formato estancado o en
retroceso.
Las tasas de lectura del país sigue estando entre las más altas de
Latinoamérica. El 73 por ciento de la población lee diarios, 6 de cada
10 lo hacen al menos una vez por semana. En cuanto a los libros, si se
considera a la población total del país, se leen casi 3 al año por
persona mayor de 12 años.
Fuente : Pagina 12